El 1 de enero, nuevas normas de transparencia entraron en vigor para combatir el fraude del impuesto sobre el valor añadido (IVA) en los Estados miembros de la UE.
Las autoridades fiscales de la UE recibirán datos sobre los pagos que les ayudarán a detectar el fraude del IVA, especialmente en el comercio electrónico. Esto es crucial ya que las pérdidas de ingresos fiscales son necesarias para financiar servicios públicos esenciales.
El nuevo sistema se basará en proveedores de servicios de pago, como bancos, entidades de dinero electrónico y servicios de giro postal, que facilitarán más del 90% de las compras en línea en la UE.
A partir del 1 de enero, estos proveedores rastrearán a los beneficiarios de pagos transfronterizos y a partir del 1 de abril transmitirán información a las autoridades fiscales de la UE sobre aquellos que reciban más de 25 pagos trimestrales.
Toda esta información se centralizará en una nueva base de datos llamada Sistema Electrónico Central de Información sobre Pagos, creada por la Comisión Europea, y estará disponible para los países miembros a través de Eurofisc, la red de expertos en la lucha contra el fraude del IVA de la UE.
Esto facilitará el análisis de datos e identificación de vendedores en línea que no cumplen con sus obligaciones de IVA, incluso empresas no ubicadas en la UE.
Los funcionarios de Eurofisc también tendrán la autoridad para tomar medidas a nivel nacional, como procesar solicitudes de información, realizar inspecciones o cancelar el registro de números de IVA.
Algunos países miembros y otros países ya han implementado disposiciones similares que han tenido un impacto tangible en la lucha contra el fraude en el comercio electrónico.