viernes, 24 de mayo de 2024
Reiteró en la importancia de hacer cumplir el Convenio de Budapest y que los jueces de Colombia estén preparados para enfrentarla
En las últimas horas, el vicepresidente del Consejo Superior de la Judicatura, Jorge Enrique Vallejo Jaramillo, y el magistrado auxiliar, Jorge Andrés Castillo Álvarez, director de la Oficina de Enlace Institucional e Internacional y de Seguimiento Legislativo, participaron en la reunión del Convenio Budapest, realizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores y organizada en desarrollo del proyecto GLACY-e del Consejo de Europa y la Unión Europea.
La idea se esta reunión es promover, desde el Consejo Superior de la Judicatura, la formación judicial contra la ciberdelincuencia, un delito que no frena y que cada vez preocupa mucho más a todos.
El magistrado Vallejo Jaramillo destacó la importancia de la formación judicial especializada para jueces en materia de ciberdelincuencia, y de fortalecer la articulación interinstitucional para mejorar las capacidades de los servidores judiciales en la lucha contra los delitos cibernéticos.
En su intervención, el vicepresidente de la Corporación subrayó la necesidad de fortalecer la aplicación del Convenio de Budapest y su protocolo como instrumento internacional para mejorar la cooperación internacional hacia seguridad en el entorno digital.
En este espacio también se habló de la importancia de adoptar reformas legislativas que permitan la plena implementación de las disposiciones del convenio internacional y su protocolo.
El Convenio de Budapest es el primer tratado internacional creado con el objetivo de proteger a la sociedad frente a los delitos informáticos y los delitos en Internet, mediante la elaboración de leyes adecuadas, la mejora de las técnicas de investigación y el aumento de la cooperación internacional. En la actualidad, el Convenio ha sido ratificado por más de 50 naciones de todo el mundo.
En un contexto lleno de profundos cambios devenidos por la digitalización, el convenio surgió como resultado del reconocimiento de dos puntos fundamentales: por un lado, la necesidad de cooperación entre los Estados y el sector privado en la lucha contra la ciberdelincuencia; y por el otro, la necesidad de proteger los intereses legítimos en la utilización y el desarrollo de las tecnologías de la información (TICs).
La presencia y aportes del Magistrado Jorge Enrique Vallejo Jaramillo en este encuentro, reafirmaron el compromiso del Consejo Superior de la Judicatura con la justicia y la seguridad en el ámbito digital, así como con la cooperación internacional para enfrentar de manera efectiva los retos que plantea la ciberdelincuencia.
En la reunión también participaron la viceministra de Asuntos Multilaterales, Elizabeth Taylor Jay; el viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa del Ministerio de Justicia, Camilo Umaña Hernández; el alto consultor presidencial para Transformación Digital, Saúl Kattan Cohen; la coordinadora del programa GLACY-e, Catalina Stroe; el jefe de la sección de Cooperación de la Unión Europea, Alberto menghini, entre otros altos funcionarios.
Y es que esta preocupación de estar a la vanguardia no es nueva. Se acrecentó con los ciberataques de alcance mundial que impactaron de forma considerable las operaciones de comercio electrónico. Hechos como estos minan la tranquilidad de los compradores online, especialmente en Colombia, donde una de las grandes barreras que existen para las compras virtuales es la confianza de los usuarios para depositar sus datos en la red.
Durante las dos semanas que siguieron al primer ciberataque, fatídico viernes para Internet, se registraron 62 variaciones del mismo virus que se esparció por el mundo. Según la compañía Kaspersky, en 2016 hubo más de 1.445.000 usuarios y empresas que fueron víctimas de secuestro de información de sus sistemas o computadores, infección de virus, entre otros.
Es claro recalcar que estos eventos son impredecibles, aunque también evitables si se toman las medidas necesarias. Desde un computador personal o dispositivo móvil, hasta plataformas y sistemas de grandes compañías, pueden ser atacados. El secreto comienza por comprar un software legal y evitar problemas que pueden surgir como consecuencia de los virus