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En medio de la controversia desatada por la propuesta del gobierno del presidente Gustavo Petro de convocar una Asamblea Nacional Constituyente, diversas personalidades han enviado cartas al mandatario expresando su rechazo a la iniciativa.
La primera carta, titulada ‘No a la Asamblea Nacional Constituyente propuesta por el presidente Petro’, cuenta con más de 200 firmantes destacados, incluidos exministros, académicos y figuras políticas. Argumentan que la Constitución de 1991 ha generado múltiples beneficios para el país y que no es necesaria una nueva constituyente, dado que existen otros mecanismos democráticos como el Congreso y la participación ciudadana.
Además, señalan que una Asamblea Constituyente podría llevar a inestabilidad institucional y política, así como representar riesgos económicos y para la democracia. “Defensa de la Constitución Política: es fundamental respetar y defender la Constitución Política como la norma suprema del Estado colombiano, garantizando la protección de los derechos fundamentales y el funcionamiento de las instituciones democráticas. Los beneficios generados por la Constitución de 1991 han sido múltiples, desencadenando importantes y poderosas conquistas en materia de derechos civiles, políticos, ecológicos y sociales. Colombia no requiere de una nueva Constitución” mencionan. Algunos firmantes notables son Alejandra Carvajal, Armando Montenegro, Carolina Barco, Guillermo Botero y Juan Carlos Echeverri.
Por otro lado, la segunda carta, titulada ‘Protejamos, desarrollemos y hagamos valer la Constitución de 1991’, está firmada por nueve exconstituyentes de 1991. Argumentan que la actual Constitución ya contempla procedimientos adecuados para las reformas y que cualquier modificación debería ser abordada a través del Congreso.
“Surgió en medio del tableteo de ametralladoras y de carros bomba que atentaban contra
todos y que además acabaron con la vida de tres candidatos presidenciales, de la iniciativa
estudiantil del Movimiento Todavía Podemos Salvar a Colombia, que fue pacífica, que no le
lastimó la piel a nadie, que congregó al país entero para lograr un encuentro de interlocutores
válidos de toda la realidad nacional, por medio de convocatoria y elección directa del pueblo,
con el fin de construir colectivamente una Constitución sin vencedores ni vencidos; una
Constitución que lo que dijera, lo dijera con la voz de todos”, señalan al inicio de la carta.
Los exconstituyentes también enfatizan que la soberanía reside en el pueblo y que ningún servidor público debe pretender apropiarse de esta soberanía. Destacan que la Constitución de 1991 surgió como un consenso ciudadano, político e institucional histórico en medio de un contexto de violencia y que debe ser protegida como un logro colectivo sin vencedores ni vencidos.
