Con un rol clave ya afianzado en las organizaciones, las áreas de cumplimiento normativo amplían su zona de influencia y se apoyan en la tecnología para hacer frente a una responsabilidad cada vez más transversal.
El compliance se ha consolidado en los últimos años como una de las áreas emergentes en las empresas. El diseño e implementación de sistemas de cumplimiento normativo no sólo busca evitar sanciones o multas, sino crear una cultura organizativa que facilite una gestión idónea de los riesgos que amenazan a las compañías en un entorno de creciente complejidad.
Se trata de una necesidad, pero también de una ventaja competitiva cada vez más valorada por los distintos stakeholders, como se puso de relieve en el observatorio Nuevas tendencias en compliance, organizado por EXPANSIÓN con el patrocinio de Aranzadi.
«Invertir en iniciativas innovadoras y contar con la experiencia de proveedores especializados resulta esencial para mejorar la habilidad de identificar y reducir riesgos», afirmó Alberto Moreno, director comercial de Aranzadi, que hizo hincapié en la necesidad de estar al día con las tendencias en compliance.
En la imagen: De pie: José Antonio Castrillo (Mazars); Iñaki Garay (EXPANSIÓN); Miguel Soler (Prosegur); Daniel Reina (Pegasus Aero Group); Edurne Sánchez (Mahou San Miguel) y Diego Recacha (Leroy Merlin). Sentados: Iván de Vicente Torres (Prima Seguros); Almudena Salvadores (Aena); Alberto Moreno (Aranzadi) e Inés de Martí (Net Craman Abogados). MAURICIO SKRYCKY