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Con la donación de un lote de 936 metros cuadrados para la construcción del nuevo palacio de justicia del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, por parte de la Gobernación de dicho departamento, se instaló la semana pasada el Conversatorio Nacional del Consejo Superior de la Judicatura ‘Comprometidos con la excelencia en el servicio y el bienestar laboral’.
La presidenta de la corporación, Diana Alexandra Remolina Botía, anunció esta noticia que permitirá reunir en un solo lugar a todos los despachos y dependencias de la Rama Judicial que funcionan en la isla de San Andrés. “Nos comprometemos a que el diseño del nuevo palacio de justicia cumpla con todas las normas que se requieren y que, además, se integre con la arquitectura tradicional del archipiélago”, indicó presidenta del Consejo Superior de la Judicatura.
En su discurso de inauguración del evento, Remolina Botía destacó los avances en la administración de la Rama Judicial en materia de transformación digital, construcción de sedes judiciales, infraestructura tecnológica y conectividad, creación de cargos permanentes y transitorios, entre otras cosas. “Nuestra misión debe ser cumplida sin titubeos: brindarle a los colombianos una justicia más accesible, digital e incluyente, que, por supuesto, transite por un camino que enaltezca al servidor judicial”, aseguró en su intervención.
También opinó sobre la Rama Judicial y dijo que: “ hoy no es la misma de ayer. Ya son más de 32 años durante los cuales el Consejo Superior de la Judicatura ha impulsado y materializado importantes cambios como órgano de gobierno y administración de la Rama”. Al evento también asistió la ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, quien felicitó al Consejo Superior de la Judicatura por organizar un conversatorio pensando en el bienestar de los funcionarios y servidores judiciales.
“Estos actos significan pensar no solo en una justicia con excelencia, sino en una justicia humana. Siempre decimos que el acceso a la justicia es un derecho fundamental, pero a veces nos olvidamos de quienes hacen posible la prestación de ese servicio de justicia”.
