Casi tres años después el Gobierno de España ha dado luz verde a la Estrategia de la Industria Farmacéutica. Nacida al amparo del Plan de Recuperación y Resilencia, el plan nace de la colaboración de cuatro ministerios y el sector farmacéutico y busca acelerar el acceso a la innovación, asegurar la autonómica estratégica y apostar por la innovación sanitaria.
Aunque por el momento la Estrategia no va acompañada de cifras de inversión global, cuando se inició el grupo de trabajo para su elaboración el Gobierno estimó una inversión global de 8.000 millones de euros de la Administración pública y del propio sector farmacéutico. En el plan participan los ministerios de Sanidad, Hacienda, Industria y Turismo, y Ciencia, Innovación y Universidades, junto con Farmaindustria, Aeseg, BioSim, Afaquim y Asebio, las principales patronales del sector y han basado la estrategia en tres pilares: garantizar el acceso equitativo y justo a los medicamentos, cubriendo las necesidades médicas no cubiertas al tiempo que se asegure la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS), fomentar la I+D+i en el sector farmacéutico y asegurar la autonomía estratégica en materia de fármacos
La estrategia también quiere dar al sector estabilidad y predictibilidad al marco normativo en el ámbito de los medicamentos y generar un ecosistema en el que innovación, producción, acceso a medicamentos y sostenibilidad se integren en un mismo enfoque. Y en este ecosistema, el Gobierno quiere que las administraciones públicas tengan un rol relevante.
El proyecto añadirá implantará medidas legislativas y no legislativas que favorezcan un mayor liderazgo público en toda la cadena del medicamento, una mayor prioridad de la salud del paciente en la investigación y una mayor autonomía estratégica del sector, ha señalado la ministra de sanidad. Entre estas medidas se crea el sistema para la evaluación de la eficiencia de las tecnologías sanitarias y la financiación y fijación de precio de medicamentos y la mejora de la evaluación de estas tecnologías y del acceso a los medicamentos, cuya normativa está en preparación
El fomento del uso de medicamentos genéricos y biosimilares, el incremento de la financiación en investigación clínica y preclínica, el refuerzo de las estructuras de soporte críticas en investigación clínica y preclínica y el impulso de la regulación y la autonomía estratégica, son otras de las medidas anunciadas.
El esquema de gobernanza de colaboración público privada para implantar la estrategia y hacer seguimiento de sus avances. Así, un Comité interministerial de seguimiento supervisará la ejecución de la Estrategia a nivel gubernamental y un Comité mixto formado por administración e industria se encargará de facilitar la cooperación y el diálogo entre sector público y privado. Además, se establece una Alianza para la Estrategia, un espacio que reunirá al Comité interministerial con agentes públicos y privados con el fin de impulsar la participación y el trabajo conjunto.
El seguimiento de la Estrategia se guiará desde un Comité Interministerial y otro mixto entre Gobierno e industria, junto a la Alianza para la Estrategia
El Gobierno espera que este modelo de colaboración pueda servir de ejemplo para otros sectores y se ha incluido en la nueva ley de industria aprobada por el Consejo de Ministros. “Hoy damos un paso adelante para garantizar que ningún paciente se quede atrás, que la investigación se guíe por las necesidades reales de las personas mediante el liderazgo público y que nuestra autonomía en medicamentos sea clave para nuestra soberanía como país”, ha incidido Mónica García.
El sector farmacéutico genera en España más de 270.000 puestos de trabajo, de ellos 56.000 directos. En 2021, la industria farmacéutica invirtió 24.533 millones de euros en investigación y desarrollo (I+D+i). España es el cuarto mercado farmacéutico de la Unión Europea (UE) en términos de facturación y el noveno a nivel mundial. Cuenta con 174 plantas de producción de medicamentos, de las cuales 106 son de medicamentos de uso humano.
España es uno de los líderes en ensayos clínicos con medicamentos, solo por detrás de los Estados Unidos y China a nivel mundial, con especial importancia en áreas como oncología y oncohematología. En 2023, el país exportó productos farmacéuticos por valor de 21.900 mil millones de euros. Se trata de la tercera exportación nacional por importe, mientras que el valor de los productos farmacéuticos importados ascendió a 24,8 mil millones de euros. La industria farmacéutica invirtió 1.400 millones de euros en investigación y desarrollo en 2022, sobre todo en investigación clínica con 834 millones de euros.