Tras los resultados del pasado domingo de los comicios en el País Vasco, los partidos con opciones de conformar Gobierno empiezan a hacer sus valoraciones. El primero de ellos, el PSE-EE ha lanzado ya su primer envite al virtual vencedor de las elecciones vascas, el PNV. Los socialistas están abiertos a reeditar su pacto con el centro derecha nacionalista, pero reclaman más peso en el futuro Ejecutivo.
Para comenzar, Eneko Andueza ya ha señalado su disposición a trabajar en un acuerdo, pero “que tenga como guía nuestros principios”. El líder de los socialistas vasco ha centrado gran parte de su intervención tras la ejecutiva autonómica en señala que el objetivo socialista “es defender un futuro mejor y hacer lo mismo con los servicios públicos, con la educación, la sanidad, los cuidados”.
En ese acuerdo que persiguen los socialistas pasa también “porque nuestra representación en las instituciones, especialmente, en el Gobierno vasco se refleje con la claridad y la contundencia de nuestros votos”. En la pasada legislatura, el PSE-EE contaba con tres consejerías dentro del Gobierno Vasco, por nueve del PNV.
Aunque desde el PNV aún no se han producido valoraciones por parte de su líder, Imanol Pradales, la presidenta del partido en Vizcaya, Itxaso Atutxa, ha asegurado que su socio preferente para formar gobierno es el Partido Socialista de Euskadi, aunnque ha remarcado que ahora es el momento de “contenidos” y de “confrontar programas”. En EH Bildu, su candidato Pello Otxandiano ha reconocido que la posición del PSE-EE respecto a un nuevo acuerdo de Gobierno con el PNV “es clara y no merece la pena tratar de modificarla”.
En declaraciones a Radio Euskadi, el representante de la coalición soberanista ha asegurado que está muy satisfecho tras haber logrado un “resultado histórico, con un crecimiento espectacular” y que abre “un panorama que es nuevo”.
Sanidad, a primer plano
La reedición del nuevo Gobierno no pude dejar por alto el que ha sido, según explicaba el CIS de precampaña el principal problema de los vascos: la sanidad.
PNV y PSE se deberán unir para hacer realidad unas líneas que prácticamente eran idénticas en los programas electorales de ambos partidos: recuperar la imagen de Osakidetza.
La apuesta del PNV se había marcado la prioridad de mejorar el Servicio Vasco de Salud-Osakidetza, asumiendo los retos de incremento de las enfermedades crónicas y del coste sanitario, falta de profesionales.
El PSEE-EE comparte muchas de las iniciativas del PNV en relación con las listas de espera, el aumento de profesionales sanitarios y el refuerzo de la atención primaria y la priorización de la salud mental.